En Clínica Dental Macenlle queremos hablaros de uno de los tratamientos de ortodoncia más utilizados, los brackets, un accesorio para corregir la dentadura que se ha convertido desde hace años en el complemento perfecto para muchas personas que han necesitado o querido un cambio saludable para sus dientes.
Desde hace años la ortodoncia ha evolucionado en gran medida y hoy en día existen muchos tipos, que normalmente se dividen en dos grandes categorías, los brackets estéticos y los metálicos.
A pesar de que este tipo de tratamientos suele hacerse a edades tempranas, cuando la mandíbula todavía está en fase de crecimiento, son cada vez más los adultos que recurren a este método para arreglar su dentadura de una manera cómoda e indolora.
En la Clínica Dental Macenlle realizamos toda clase de tratamientos de ortodoncia con brackets estéticos y metálicos.
Brackets estéticos
Los brackets estéticos son muy discretos, apenas se ven en distancias medias y resisten muy bien a cualquier tipo de uso.
Dentro de los brackets estéticos, los mejores y más utilizados por su durabilidad son los brackets de zafiro.
La discreción viene dada por el material con el que están hechos: el cristal de zafiro. Este material es transparente, por lo que a través de él se puede ver el diente del paciente. Además de los brackets, los arcos, las ligaduras y las gomas que se utilizan a lo largo del tratamiento, son blancos, en lugar de metálicos.
Además de esto, los brackets de cristal de zafiro no se manchan ni se ponen amarillentos, por lo que no es necesario blanquearlos.
Brackets Metálicos
Son sin duda los más utilizados, ya que su precio es ligeramente inferior a los estéticos y la relación con la calidad y durabilidad de los mismos es excelente.
Los brackets metálicos se diferencian principalmente de los estéticos en que su composición es de materiales opacos, es decir, metálicos, que se ven más que uno de zafiro.
Esto no quiere decir que sean antiestéticos, ya que en la actualidad existen brackets metálicos con diseños muy discretos, que apenas se ven a distancias medias.
Su versatilidad hace que sean muy utilizados tanto en niños como adultos, ya que son brackets fijos, que no se mueven con ningún tipo de uso, y solo se necesita cambiarlos periódicamente para evitar su desgaste con el uso continuado.
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